Pensaba que quizá, tal vez, por alguna razón misteriosa y
oscura, querrías estar conmigo.
Yo te diría que no y vos insistirías.
En el mejor de los casos, nunca insistís, das por perdido
todo al instante, al segundo de atravesarte.
Yo siempre te reemplazo; a vos y a los demás. Y al final,
nunca siento calor.
Yo tomo, tomo todo lo que puedo tragar para acordarme que existís, que alguien más
existe. Y te reemplazo. Constantemente.
A veces no damos ni la oportunidad a la primera pregunta.
ResponderEliminarReemplazamos o desplazamos,para quitar del centro y llevar a los costados por un tiempo...pero con éxito?
ResponderEliminar